Si Es el ejido Ciénega del Carmen, ubicado en Parras de la Fuente, Coahuila, a 70 kilómetros de terracería de la cabecera municipal.

En este poblado, 150 familias se abastecen de un pozo de agua que ha dado vida a la comunidad por décadas, pero el líquido que corre por sus cauces -construidos por los mismos ejidatarios- no es el óptimo para consumo.
De hecho, el salitre y otras sustancias que contiene el agua hanprovocado padecimientos gastrointestinales en la población, a decir de Teresa de Jesús Vázquez, habitante del ejido.

“Muy seguido nos enfermamos de infecciones en la panza, los doctores nos dijeron que era por el agua sucia; aunque la hervíamos, no servía de nada”, lamentó.
Antaño, las familias en camionetas y en burros recorrían hasta 15 kilómetros rumbo a la carretera libre Saltillo-Torreón, para buscar el preciado líquido.
Este 31 de octubre, gracias a una inversión del gobierno del Estado que fue gestionada por la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas, se entregó de un sistema de purificación que limpia el agua de impurezas y es más sana al beberla.

“Se gestionó esta purificadora con una inversión de 150 mil pesos. Se da solución a este problema, el gobierno le invirtió gracias a nuestra gestión”, señaló José Luis López Cepeda, dirigente estatal de la UNTA.
Además de las 150 familias beneficiadas, pobladores de la Cecilia, El Mesteño y otros poblados del pueblo mágico podrán acercarse a surtirse de agua para su consumo.






