*Sin agua, sin empleo, y aumentan la violencia y delitos
Una crisis económica muy fuerte está viviéndose en los municipios de la región Carbonífera y algunos pequeños poblados de la región Centro y Cinco Manantiales del estado de Coahuila.
Decenas de denuncias a diario llegan a la redacción de 7 DE JUNIO DIGITAL, informando y mostrando con cámaras de seguridad y videos tomados con teléfonos celulares, cómo prácticamente la ciudadanía no tiene un sustento y se ha dado al robo hormiga de cualquier cosa; prácticamente lo que sea es objeto de ultrajo por los amantes de lo ajeno.

Vehículos, materiales, metales, muebles, ropa y hasta mascotas son objetos comunes de robo, de los jardines, patios y pórticos en domicilios de estos municipios.
Esto viene a consecuencia de la falta de compra de carbón que en un principio complicó las cosas económicamente para los poblados de esta región.

Sin embargo, esto se aúna también a la desaparición de fuentes de trabajo.
La mayoría de la población económicamente activa ha emigrado a otras regiones del Estado y a otros estados de la República o inclusive a Estados Unidos de manera ilegal, o de planta, con permisos temporales de turismo, poniendo en riesgo su integridad legal, y dejando a sus familias en México con la esperanza de mejorar con remesas la situación de escasez.
Los gobiernos municipales no se dan abasto. Los servicios primarios están colapsados, la recolección de basura, el alumbrado público, el drenaje y la distribución de agua potable están prácticamente desahuciados.
La falta de presupuesto para la renovación de su infraestructura y el pago de empleados son los problemas principales que, de raíz, afectan a cada domicilio en la región.

Las autoridades del orden público han optado por enfocar sus esfuerzos en el bloqueo del trasiego de drogas por grupos delictivos, y los delitos de menor impacto se han convertido en las estadísticas más alarmantes.
A decir del último informe de la Fiscalía General de la Región Carbonífera, el robo de autopartes aumentó casi en el mismo porcentaje que el robo a casa habitación, un 50 por ciento al mismo semestre del año pasado.
Así mismo, el robo a mano armada a comercios, y lo más preocupante es que en estas estadísticas la mayoría de los detenidos son menores de edad de sexo masculino.

El recorte presupuestal federal no ha permitido que los fondos económicos de cada municipio puedan seguir generando programas sociales y de reintegración social.
Lo que más ha golpeado a estos municipios del estado de Coahuila ha sido la falta de actividades por la pandemia COVID-19.
La Secretaría de Educación Pública localiza en un foco rojo el hecho de que no hay presupuestos locales para poder rehabilitar de golpe al regreso a clases; las instalaciones están destruidas y abandonadas en estas regiones.
Todo esto se suma también a una ola de violencia generalizada que se ha reportado por el sistema DIF, donde el nivel de violencia intrafamiliar desprende centenares de atenciones con respecto a la afectación directa a mujeres y niños.
Esta realidad que envuelve a la población de la región Carbonífera y municipios aledaños sobrepasa la capacidad de las autoridades municipales.





