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Tiene Saltillo proyecto para evitar inundaciones al norte

A través de obras de canalización de arroyos, control y regulación de escurrimientos y construcción de sistemas pluviales, así como acciones preventivas, el gobierno Municipal de Saltillo, en conjunto con el gobierno del Estado y la iniciativa privada, llevan a cabo un proyecto hídrico integral que evitará inundaciones en el sector norte, dio a conocer el director del Instituto Municipal de Planeación, Óscar Pimentel González.

Este dará solución a esta problemática que tiene más de 15 años en la ciudad, dijo, donde se ejecutarán obras por 330 millones de pesos.

Recursos del ISN permitirán la inversión de 330 millones de pesos; 200 etiquetados el año pasado a través del esquema de Proyecto Público-Privados que se están conformando, y 130 más que recientemente se aprobaron en el presupuesto 2021.

Pimentel González detalló que el proyecto cuenta con un grupo de trabajo gubernamental en el que intervienen las áreas del Implan, Desarrollo Urbano y Obras Públicas por parte del gobierno de Saltillo; la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento, por parte del Gobierno de Coahuila; y la Comisión Nacional del Agua.

Proyecto integral y con tasa de retorno de 500 años

Pimentel González dio a conocer que el plan contempla cuatro acciones principales: la ejecución del proyecto de canalización del Arroyo del Cuatro Bajo; la realización de obras de control y regulación de los escurrimientos pluviales en los arroyos Canoas y Blanco; la construcción del sistema pluvial Eulalio Gutiérrez; y la realización de obras preventivas para mitigar afectaciones en la próxima temporada de lluvias.

La canalización del Arroyo del Cuatro Bajo cuenta con un presupuesto de 200 millones de pesos, los cuales fueron autorizados por el ISN, y cuyo trazo del canal ya fue validado por la Conagua, por lo cual solo se espera que la dependencia federal valide el proyecto técnico definitivo para poder liberar los terrenos por donde pasará el canal, licitar la obra e iniciar su ejecución.

Esta obra consiste en la construcción de un canal de casi seis kilómetros y medio desde el fraccionamiento Los Molinos hasta desembocar en el arroyo Ceballos atrás del Club Campestre, con una dimisión del canal variable según la topografía del terreno.

El director del Implan resaltó que el diseño de la obra está hecho con una tasa de retorno de 500 años, lo cual significa que la probabilidad de que el canal se vea desbordado por los escurrimientos es de tan sólo el 0.2 por ciento para un año cualquiera; el canal permitirá desalojar alrededor de 950 metros cúbicos de agua por segundo.

Como parte del proyecto integral también se realizarán obras de control y regulación de los escurrimientos pluviales en los arroyos Canoas y Blanco, con la participación de vecinos y desarrolladores inmobiliarios.

Con ello se construirá un sistema pluvial a base de rejillas de piso y ducto de cajón de concreto armado, presas rompe picos y vasos reguladores que permitan controlar las velocidades del agua y conducirla ordenadamente al arroyo Blanco, cuyo proyecto ya se encuentra en proceso de validación por parte de Conagua.