El estado de Texas en EEUU dio por terminado este miércoles 10 de marzo de 2021 a una orden local de usar cubrebocas de forma obligatoria y a las restricciones de ocupación de los negocios, una medida que algunos han defendido como un acto de libertad y que otros han descrito como estupidez.
Texas fue uno de los primeros estados que reabrió su economía después de la primera ola de casos de la pandemia en mayo y volvió a liderar al país nuevamente la semana pasada, cuando Abbott anunció la flexibilización de las medidas en medio de una caída de los nuevos casos diarios de COVID-19 y por el despliegue de vacunas.
Hasta el domingo, un 18% de la población de Estados Unidos había recibido al menos una dosis de una de las vacunas disponibles, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés).

Las autoridades de los condados en zonas donde los pacientes de COVID ocupen el 15% o más de las camas de hospital durante siete días consecutivos pueden promulgar nuevas restricciones de ocupación y órdenes de uso de cubrebocas, según la medida de Abbott, pero ninguna región se encuentra actualmente en esa situación.
El consejo de la ciudad de Austin votó a favor de seguir exigiendo cubrebocas y desafió a las autoridades estatales a demandar a la ciudad.
“En Austin, estamos comprometidos con salvar vidas”, escribió el concejal Greg Casar en Twitte.