Bruselas, Bélgica. – (Agencias) Rusia ha dejado claro que las conversaciones con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sobre Ucrania estan llegando a “un callejón sin salida”, mientras amenazaba con tomar “medidas necesarias” si no se cumplían sus demandas, como desplegar misiles en Cuba y Venezuela.
En una acción que han calificado los expertos como intento de “subir la apuesta” con la administración Biden, Sergei Ryabkov, el viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia y quien encabeza la delegación rusa, declaró a la televisión rusa que no podía confirmar ni descartar el envío de activos militares a Cuba y Venezuela si fracasan las conversaciones. Consultado sobre estos pasos, dijo que “todo depende de las acciones de nuestros homólogos estadounidenses”.
El representante de Estados Unidos ante la Organización para la Seguridad y Cooperación de Europa (OSCE), Michael Carpenter, también dejó en claro que no se había logrado desactivar las tensiones en la reunión del jueves. “El tamborileo de la guerra suena fuerte y la retórica se ha vuelto bastante estridente”, dijo después Carpenter a los periodistas.
Mientras tanto, el ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo que las conversaciones e la OSCE había fortalecido el apoyo internacional a Ucrania, frente a lo que llamó “ultimátums ilegales” y presión militar de Rusia. Dijo que las naciones de occidente compartían la posición de Ucrania de la libertad para elegir a quien se unía, incluida la OTAN.
“Ucrania también continuará trabajando activamente con socios para implementar un paquete integral para disuadir a Rusia de una nueva ola de guerra en Europa, que ya ha comenzado”, dijo, en un comentario publicado en el sitio web de su ministerio.

Una andanada de críticas y declaraciones pesimistas de altos funcionarios surgieron después de que el ministro de Relaciones Exteriores de Polonia, Zbigniew Rau, dijo que Europa enfrenta su mayor riesgo de guerra desde en 30 años.
Rau se dirigió a los 57 países de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa, en la tercera vez que Rusia discute la seguridad con los países occidentales. El ministro polaco, que asumió la presidencia de la OSCE, dijo a los periodistas: “No puedo decir que sea inminente un gran avance” en las discusiones sobre la seguridad europea, al mismo tiempo que se comprometió a iniciar un diálogo. “Algunos de los estados participantes creen que es suficiente hacer una declaración y no participar en el debate”, dijo, sin nombrar a los países.
“Parece que el riesgo de guerra en el área de la OSCE es ahora mayor que nunca en los últimos 30 años”, había dicho Rau a los delegados anteriormente. “Durante varias semanas nos hemos enfrentado a la perspectiva de una gran escalada militar en Europa del Este”.

El viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Ryabkov, que encabezó la delegación rusa en las conversaciones con Estados Unidos el lunes, dijo que las discusiones estaban llegando a “un callejón sin salida”. “No veo ninguna razón para volver a sentarme en los próximos días, para reunirnos nuevamente y comenzar estas mismas discusiones”, dijo, citado por la agencia de noticias Interfax.
“Proponemos ir paso a paso por el texto, trabajarlo para llevarlo a una etapa en la que estaría listo para firmar. Esto es imposible hoy, porque en los elementos clave de estos textos, Estados Unidos y sus aliados dicen categóricamente ‘no’”.
Por su parte, Michael Carpenter reafirmó la disposición de Estados Unidos de continuar el dialogo, pero insistió en que “no vamos a negociar los principios básicos”, y enumeró los Acuerdo de Helsinki de 1975, la Carta de la ONU y la Carta de París en 1990, que afirmaron el derecho soberano de los estados a tomar sus propias decisiones sobre su seguridad, libre de amenazas de fuerzas y garantizada la inviolabilidad de las fronteras.

“Esos son sacrosantos. Esos son nuestros cimientos”, dijo Carpenter. Dijo que no sabía si había planes para poner por escrito la posición de Estados Unidos, como exigían los rusos. “Estamos felices de hablar sobre los mecanismos de resolución de conflictos, felices de hablar sobre la moderación recíproca y la reducción de riesgos y el fomento de la confianza, la transparencia militar, todas esas cosas están sobre la mesa”, dijo Carpenter, dando la bienvenida a una iniciativa polaca para establecer un sistema más regular de diálogo entre los 57 miembros de la OSCE para discutir preocupaciones de seguridad mutua.
Sin embargo, la misión rusa escribió en un tuit, citando al embajador ruso ante la OSCE, Alexander Lukashevich: “Si no escuchamos una respuesta constructiva a nuestras propuestas dentro de un plazo razonable y continúa el comportamiento agresivo hacia [Rusia], tendremos que tomar las medidas necesarias para garantizar el equilibrio estratégico y eliminar las amenazas inaceptables a nuestra seguridad nacional”.