En el panteón Santo Cristo, de la ciudad de Saltillo, Coahuila, se registró un gran número de visitantes, este 2 de noviembre.
Familias completas llegaron a pasar la mañana o la tarde en la última morada de seres queridos que se adelantaron en el camino, y ser parte de estas fiestas luego de dos años de pandemia COVID-19.
La familia Pérez colocó previamente un altar en casa para recibir a las animas del más allá, convivir con ellas, y ya por la mañana llevarlas de regreso al panteón.

“Esperamos a las ánimas desde la media noche, convivimos hasta el amanecer, y por la mañana llevamos el altar a la tumba para preparar el regreso al inframundo a las 3:00 de la tarde”, platicó Lucila Pérez.
“Con estas actividades, los que nos visitan desde elmás allá reúnen a los vivos en familia para así no perder ese lazo familiar”, agregó.
Al exterior de este camposanto hubo verbena popular, venta y consumo de gorditas, burritos, pizzas, taquitos de milanesa y tripa; los comerciantes de flores y comidas convivieron en armonía y así ganaron todos.