Tereso Medina, como parte de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), formó parte de una comitiva que presentó a la presidenta Claudia Sheinbaum un conjunto de propuestas para avanzar hacia la implementación de la semana laboral de 40 horas, medida que beneficiaría a más de 13.4 millones de trabajadores en todo el país.
El planteamiento busca fijar constitucionalmente una jornada máxima semanal sin afectar los derechos adquiridos ni modificar los salarios actuales.
Tereso Medina, figura clave dentro de la CTM, destacó que el encuentro con la presidenta fue una experiencia “muy positiva” y reconoció su interés genuino por mejorar las condiciones laborales de las y los trabajadores del país.
Entre los puntos centrales de la propuesta se encuentra la prohibición de horas extras para menores de edad, así como una aplicación progresiva de la reducción de la jornada.

De acuerdo con el documento presentado, durante 2026 el Congreso de la Unión y los congresos locales deberán analizar y aprobar la reforma para que pueda entrar en vigor ese mismo año. La disminución se realizaría gradualmente, con una reducción de dos horas por año, hasta alcanzar el objetivo en enero de 2030.
La CTM también plantea establecer un límite máximo de 12 horas de trabajo por día y permitir la prolongación extraordinaria de la jornada solo con consentimiento del trabajador, con un pago triple para las horas adicionales, que no deberán exceder cuatro por día.
Para garantizar el cumplimiento, se busca que los empleadores mantengan un registro detallado de las horas trabajadas, lo que permitirá dar seguimiento puntual a la transición hacia la nueva jornada laboral.






