El alto flujo de migrantes provenientes de Venezuela, Honduras, Guatemala y El Salvador originó un nuevo cierre de uno de los puentes internacionales ubicados en Eagle Pass, Texas, y Piedras Negras, Coahuila.
En la cuenta de Facebook del gobierno norteamericano se anunció un nuevo cierre a partir del 27 de noviembre desde las 3:00 de la tarde.
Esta decisión afecta directamente las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos.
El tráfico con dirección al sur del vecino país a territorio nacional no se verá afectado, se afirmó mediante un comunicado emitido por la ciudad de Eagle Pass, aunque aclara que la decisión fue tomada por su gobierno federal.
Hace un mes, el mayor de esta ciudad, Rolando Salinas, dio a conocer de las afectaciones económicas que ascendían a los 500 mil dólares diarios y que, de seguir, podría declararse en quiebra la ciudad.
Por otro lado, integrantes de la casa del migrante “Frontera Signa” informó que aproximadamente 800 personas llegan a diario a esta frontera -en su mayoría son familias- y no cuenta con la capacidad de atención.
En casas semejantes, ubicadas en la ciudad de Monclova, Coahuila, el flujo o llegada de migrantes es de 500 al día.
Desde la comida hasta la atención de brindar techo y servicios, las casas receptoras de personas migrantes se han declarado incompetentes y hacen el llamado a las autoridades del Instituto Nacional de Migración a dar una posible solución a este fenómeno.









