Durante las últimas semanas el País está viviendo un lamentable repunte de violencia.
Así lo señalan hechos ocurridos en entidades como Tamaulipas, donde todo parece indicar que estarán en la perpetuidad a manos del crimen organizado, y la suma de entidades como Zacatecas y San Luis Potosí, donde día tuvieron buenos índices de seguridad y hoy están viviendo la ausencia total por parte de las autoridades.
De entrada, se han cumplido 24 días de la desaparición del activista y ex diputado local “El Mijis”, por cierto, gente de la “4T”.
San Luis Potosí dice que la última vez que se le vio fue en Coahuila y nuestra Fiscalía señala que no, que ya estaba el Nuevo León. Será melón, será sandía, el activista aún no aparece.
Cómo plato fuerte, cinco jóvenes levantados y asesinados en Zacatecas, donde el Cártel de Sinaloa culpa al de Nueva Generación, y hasta se dan el lujo de difundir sus mensajes mediante redes sociales.
Y hasta postre traemos, pues con los vecinos de Nuevo León, la semana arrancó con reportes de conductores informando a las autoridades de partes de cuerpos tirados en las carreteras, hacia los municipios de García y El Carmen.
El problema es que no hay quien ayude a los mexicanos, porque quienes lo generaron ya no están, y quiénes están no tienen responsabilidad porque, desde su criterio, ese es problema de los otros sexenios.