Los ciudadanos derrotaron 1 – 0 al Tottenham en la final de la Copa de Liga para convertirse en el máximo ganador de esta competencia junto al Liverpool, ambos con ocho títulos.
El equipo de Pep Guardiola fue quien más busco ganar el encuentro, ya que tuvo 21 disparos, pero solo cuatro a puerta. Mientras que Tottenham solamente disparo una sola vez hacía al arco de Steffen.
Laporta fue el autor del único tanto que definió el resultado gracias a una jugada y asistencia por parte de Kevin De Bruyne. Al minuto 82 cayó este gol con la cabeza que gritaron con fuerza toda la plantilla.
Un partido que estará grabado en la mente de los aficionados, quienes regresaron al estadio después de mucho tiempo y junto al equipo celebraron con gran euforia.
Los Spurs se quedaron tendidos en la lona, llorando y consolados por los rivales, en una imagen sumamente triste porque intentaron obtener la victoria sin tener las oportunidades necesarias.
Heu Ming-Son, Harry Kane y Gareth Bale fueron los rostros desconcertados en el terreno de juego. Se veía cerca romper la mala racha sin ganar un título, aunque esto no fue así y el técnico más joven de la Premier League ya conoce un sabor amargo de perder una final.