Eran las 6:00 de la mañana con 25 minutos del viernes 16 de septiembre, y María Guadalupe apenas había abierto su casa para sacar sus mesas y colocar refrescos, café y una hielera con gorditas que vende para salir adelante.
Pero unos malvivientes se la robaron, quedándose sin la ganancia del día y sin la hielera en la que mantiene caliente la comida preparada.
El grupo de delincuentes hizo de las suyas al norponiente de la ciudad de Saltillo, en la avenida Géminis, entre la colonia Valencia y Ciudad Las Torres.
La mujer apenas iniciaba la venta de gorditas afuera de su casa cuando observó la camioneta que se estacionó, y el ladrón que descendió sólo para tomar el artefacto e irse junto con sus cómplices a toda velocidad en el vehículo.
María Guadalupe ha conseguido dos hieleras pequeñas para seguir trabajando, pero le hace falta una grande.
Señala que ese día la policía llegó cuatro horasdespués del robo.
La mujer pide a los padres de familia que eduquen a sus hijos, porque hoy fue una hilera de gorditas, pero mañana puede ser algo más, y las consecuencias graves o mortales, pues otra víctima podría defenderse y arrebatar la vida a los ladrones.
