El desarrollo de las jornadas de vacunación en Saltillo contra el COVID-19 para adolescentes de 15 a 17 años de edad sin comorbilidades ha sido desafortunado.
Este martes 30 de noviembre se convocó a la población cuya primera letra del apellido fuera de la F a la Q; lamentablemente la Secretaría del Bienestar delegación Coahuila ha limitado los puntos de vacunación y habilitó sólo dos sedes, ambas peatonales: Canacintra y Ciudad Universitaria de Arteaga.
Lo anterior se traduce en largas filas, horas de espera y, sobre todo, que no hay manera de respetar los protocolos establecidos para evitar el contagio del coronavirus.

Los jovencitos (y sus padres) deben pasar horas bajo el sol, sin agua, baños portátiles, sombra, sillas o espacios que les permitan hacer un poco más confortable su aguardo.
Fueron muchas las quejas que al respecto se compartieron mediante redes sociales, donde se expresó de manera reiterada la inconformidad de padres e hijos; hubo quienes debieron esperar hasta ocho horas para recibir la inyección.
Se cita a los ciudadanos de 8:00 am a las 2:00 pm, pero la dependencia no cuenta ni con el personal, ni con las dosis suficientes para lograr atender a quienes desean vacunarse, por lo que, sin importar el tiempo invertido, hay quienes no alcanzan el biológico.

Mañana miércoles 1 de diciembre se recibirán de la letra R a la Z, pero no hay indicios de que pueda mejorar la logística.