El gobernador Miguel Riquelme Solís encabezó el homenaje póstumo que el pueblo y el Gobierno de Coahuila rindió al oficial de la Policía Estatal, Carlos Enrique Solís Peña, que el pasado martes 2 de noviembre perdió la vida en el cumplimiento del deber durante un enfrentamiento contra delincuentes, en el municipio de Hidalgo.
“Su sacrificio no será en vano; hoy reafirma nuestra determinación por blindar Coahuila en contra de todo interés ajeno al bienestar colectivo, y de afrontar cualquier amenaza que intente vulnerar la tranquilidad y el orden público, base del desarrollo y la prosperidad de nuestra sociedad”, subrayó.
Ante la hoy viuda del elemento, Sofía Guadalupe Peña Arriaga; de sus padres, Alejandrina Peña Álvarez y Miguel Ángel Solís Badillo; autoridades civiles y militares, y compañeros del servidor público, el gobernador enfatizó que la máxima prioridad del Estado es la paz de sus habitantes.

Transmitió sus sinceras condolencias a todos los seres queridos del cumplido elemento de la Policía Estatal, y les reiteró el permanente apoyo, solidaridad y acompañamiento del Gobierno del Estado.
“Despedimos hoy a un policía ejemplar que desde enero de 2019 que se incorporó a la corporación estatal se distinguió como un oficial con el más alto sentido del deber, entregado por entero a la misión salvaguardar la vida de las y los coahuilenses”, expresó este día 4 del mes en curso.
“Le recordamos como un oficial lleno de juventud y vigor, poseedor de singular valor y honor, que se ganó la amistad de sus allegados por su compañerismo y su espíritu fraternal, donde patentizó su vocación por la construcción de una mejor sociedad, donde se cumpla la Ley y sean respetados los Derechos Humanos”, dijo.
En las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública, en cuyo Muro de Honor quedó inscrito para la posterioridad el nombre del policía estatal, el gobernador reiteró que en la búsqueda de la paz de toda la población “no descansamos ni un sólo día en esta misión”.

El mandatario encabezó la primera guardia de honor ante el féretro, junto al alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas; la titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Sonia Villarreal Pérez; el fiscal general del Estado, Gerardo Márquez Guevara; y el comandante de la VI Zona Militar, General Guillermo Nava Sánchez.
Previamente se tuvo el pase de lista, en el que los elementos de Seguridad Pública citaron el nombre del oficial Solís Peña.
Los elementos que integraron la guardia permanente que custodió su féretro recogieron el estandarte del Estado de Coahuila que cubrió el ataúd, para entregarlo al gobernador, quien a su vez lo depositó en las manos de su viuda Sofía y sus padres, Alejandrina y Miguel Ángel.
Elementos de la Policía Estatal tuvieron a su cargo un disparo de salva en honor del valiente oficial.

La secretaria de Seguridad Pública transmitió sus condolencias a la viuda, Sofía Guadalupe, y al pequeño Carlos Nicolás, hijo del oficial Carlos Enrique.
“Compartimos su dolor, la angustia y el coraje al ver cegada su vida, policía ejemplar que cayó en este cobarde ataque dentro de la emboscada cuando, precisamente, junto a sus compañeros de grupo, cumplía el alto deber de proteger a la ciudadanía de nuestro estado”, dijo”, “estamos aquí para rendir honor a Carlos y a quienes se enfrentaron, junto con él, a repeler este ataque cobarde, y que hoy se debaten entre la vida y muerte”.