Jartum, Sudán. – (Agencias) El estado de Nilo Azul, en el sur de Sudán, ha sufrido durante días violentos enfrentamientos tribales que ya han dejado al menos 65 personas fallecidas, de acuerdo con la información ofrecida por el ministro de Salud, Gamal Nasser al-Sayed. Además, agregó, unas 150 personas han resultado heridas en los enfrentamientos entre las etnias Hausa y Birta. La mayoría de los muertos eran hombres jóvenes, agregó.
Sayed ha pedido insistentemente a las autoridades de Jartum, la capital del país, ayuda para transportar por aire a 15 personas gravemente heridas debido a que los hospitales del Nilo Azul carecían del equipo y de medicamentos necesarios para salvarles la vida.

Los enfrentamientos iniciaron tras el asesinato de un agricultor a principios de la semana pasada y continuaron hasta el sábado, según el gobierno local. Las autoridades desplegaron las Fuerzas de Apoyo Rápido militares y paramilitares para traer estabilidad a la región. También impusieron un toque de queda por la noche y prohibieron las reuniones en las localidades de Roseires y Damazin, donde se produjeron los enfrentamientos.
Los medios locales informaron que miles de personas habían huido de sus hogares desde que estallaron los enfrentamientos. Sudán tiene una larga historia de violencia tribal y está en crisis desde que los militares tomaron el poder en un golpe de estado en octubre de 2021.

Como todos los golpes de estado en África, ha puesto en entredicho la breve transición del país hacia la democracia después de casi tres décadas del gobierno represivo de Omar al-Bashir. Un levantamiento popular puso fin al régimen y fue destituido junto a todo su gabinete en 2019.






