Estatal

Corren a pequeño autista de centro comercial

Polett Delgado

Alejandra Durón es madre de un pequeño de 4 años, con autismo, un proceso que no es sencillo enfrentar ante una sociedad ignorante.

El pequeño Fabián tuvo una crisis justo cuando estaba haciendo las compras de la despensa junto a su madre, en la tienda Bodega Aurrera Plan de Guadalupe, en Ramos Arizpe.

A pesar de que Alejandra demostró con una credencial la condición del pequeño, el personal de la tienda fue absolutamente intolerante a la situación y los sacó de la tienda.

«Jamás, juro que jamás había sentido tanto coraje e impotencia como hoy. Como cada semana vamos a hacer el mandado a Bodega Aurrera de Plan de Guadalupe, hoy nos tocó un mal día con Fabián debido a la alteración del nuevo medicamento, tuvo una crisis en Aurrera. Llega un guardia y nos corre, literalmente nos pide que nos salgamos de la tienda.

No tenía tiempo de grabar, ni siquiera de discutir, ya que mi niño seguía alterado. Solo le comenté la situación, mostré su credencial de discapacidad y se fue. Entré en un llanto horrible, ¿Cómo es posible que pase esto?.

Duré mucho tiempo en decidir si ponerle su credencial de discapacidad o no porque no me gustaba traerlo etiquetado, pero ni con eso es suficiente. No puedo ponerle un cartel y decirles: «Mi hijo tiene AUTISMO, sé paciente», porque ya sería demasiado. Mi gordito no estaba afectando a nadie, solo estaba llorando y gritando. No estaba en el piso, lo teníamos cargado. Amablemente pedí que le hablaran al gerente y jamás llegó. Ahora no puedo ir a ningún lado sin que lo señalen. Él no sabe absolutamente nada».