Josefina Mendoza, una de las artesanas indígenas originaria de Veracruz, ha acusado a un conductor de Uber por haberle robado más de 39 mil pulseras que ella misma hizo a mano a lo largo de cinco meses para poder venderlas en la Ciudad de México y así obtener ingresos para su sustento diario.
Según lo ha declarado la artesana a medios nacionales, había estado realizando las pulseras para venderlas en la capital del país y con las ganancias esperaba poder comprar medicinas para sus hijos y techar su casa, la cual se ubica en Acayuan, Veracruz, antes de que llegara la temporada de lluvias.
Fue con ayuda de un familiar que pidió el servicio de Uber para trasladarla desde Naucalpan hasta la colonia Magdalena Contreras, en la CDMX, y cuando llegó el conductor guardó dos costales llenos de sus artesanías en la cajuela de un auto Dodge.
La víctima aseguró que cuando llegó a su destino y se pudo bajar de la unidad, el conductor se arrancó del lugar de forma rápida, sin haberle permitido bajar los costales, en donde llevaba el trabajo realizado a lo largo de cinco meses.
Hasta el momento la aplicación del taxi no se ha manifestado respecto al triste caso, por lo que la afectada difundió la fotografía y los datos del conductor de Uber, con la esperanza de que le ayuden a recuperar su mercancía.
