No cabe duda que el que quiere, puede, y Carlos Ortiz, un hombre dedicado a la música desde que era niño, está convencido de que su fe, acompañada de un poco de talento, ayuda, y podrá seguir adelante con su familia.
7 DE JUNIO DIGITAL lo visitó en su domicilio, en la colonia Saltillo 2000, donde vive con dos hijos y su esposa.
Ahí tiene dos guitarras pero quebradas; aun así las utiliza para salir a las calles a cantar y ganarse unas monedas.
Ha ganado concursos de canto e incluso le conocen como “el que canta como Arjona”.
Y sí, la verdad sabe interpretar, pero sus instrumentos ya no le ayudan.
El músico espera ser bendecido con una guitarra; si alguien quiere donarla, si entre varia personas hacen aportaciones para comprarla, él estará feliz de usarla para poder cantar en espacios públicos y ganarse la vida de manea decente.