Dentro de las tradiciones católicas del Jueves Santo está la de visitar los siete templos.
En cada uno, hay que hacer una oración, sin embargo, en algunos de los más importantes de la ciudad de Saltillo, como San Francisco, o la Catedral de Santiago, pese a la afluencia de fieles, decidieron cerrar las puertas porque los encargados de cuidar la casa de Dios se iban a ir a comer.
Los feligreses no tuvieron de otra que orar al exterior de los templos, para así cumplir con su intención según dictan las tradiciones de la fecha.
Algunos cuestionaban que cómo era posible que cerraran el templo en un día tan especial como el Jueves Santo, fecha en que de manera permanente se visitan los centros religiosos.
No es la primera vez que ello ocurre, ya que en el pasado Miércoles de Ceniza sucedió en el tempo de San Francisco, donde a la 1:00 de la tarde cerraron las puertas porque los encargados tenían que ir a comer, dejando a los creyentes afuera sin poder aplicarse la ceniza.

