Dentro de una sesión tensa, el líder laborista, Keir Starmer, le preguntó a Boris Johnson sobre si había pensado en dejar su cargo, por lo que el primer ministro británico respondió, » No «.
Starmer le reprocho por poner al Reino Unido en un situacion vergonzosa, después de que la policía Metropolitana de Londres confirmara que va a investigar las reuniones en Downing Street que pudieron violar la normativa.
Por su parte, Boris informó en la Cámara de Comunes que mostrará el documento de manera completa, entre temores de los diputados de que dé a conocer solamente una versión recortada. y ha acusado a Starmer, el antiguo fiscal del Estado de ser un, » Oportunista » y de ser » más un abogado que un líder».
El primer ministro logró esquivar las preguntas relativas a su futuro y a los festejos de los funcionarios durante la pandemia, argumentando que los ciudadanos quieren que se centre en los grandes asuntos, como lo es la crisis energética o el aumento de la inflación.
Afirmó que el laborista y otros lo quieren completamente » fuera su camino», ya que menciona que el ha conseguido grandes logros para el Reino Unido.
