Después de verse rodeadas por las fuerzas ucranianas, las tropas rusas se han retirado el día de ayer de la ciudad clave ucraniana de Lyman, que antes se encontraban ahí, mientras que la contraofensiva ucraniana en el este del país libera más territorio, ha sido la victoria más reciente de la contraofensiva ucraniana que ha humillado y alterado al Kremlin.
El retiro del ejército ruso de Lyman ha generado complicaciones de manera internacional el rechazo de su maniobra de la anexión de las cuatro regiones de Ucrania y allana el camino para que las tropas ucranianas puedan adentrarse aún más en un territorio que Moscú reclama ahora ilegalmente como propio.
Putin ha intensificado esta semana sus amenazas de utilizar la fuerza nuclear y utilizó su retórica más agresiva.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha asegurado haber infligido los daños a las fuerzas ucranianas en su lucha por retener Lyman, pero ha admitido que las tropas rusas, superadas en número, se había retirado a posiciones que son más favorables.
El informe ruso se ha producido poco después de que la fuerza aérea ucraniana mencionara que había entrado en Lyman y de que el jefe de despacho del Presidente ucraniano subiera fotos de una bandera ucraniana izada en las afueras de la ciudad.
