Esta mañana del 2 de abril, en las instalaciones de la iglesia de Nuestra Señora del Refugio, en la colonia Landin, el obispo de la Diócesis de Saltillo, Hilario González, acompañado del sacerdote Víctor Sánchez, vicario de esta parroquia, y de otros sacerdotes, entablaron diálogo con manifestantes que están en desacuerdo con de la aparente mala administración del templo, y en la posible instalación de una nueva casa del migrante en sus territorios.
Apenas llegó el obispo Hilario González a tratar de dialogar con la enardecida comunidad, tuvo que abandonar el sitio, siendo que durante más de una hora no pudo instalarse el diálogo
Los feligreses gritaron conconsignas en contra de Víctor Sánchez, quien ha sido señalado de robar el presupuesto de la parroquia, y permitir que personas ajenas tomen la decisión arbitraria de construir y utilizar las instalaciones de Nuestra Señora del Refugio como una casa de migrantes.
Tras “calentarse” la plática entre los sacerdotes y la comunidad, el vicario tuvo que salir protegido por seguridad pública, ya que hubo un conato de linchamiento en su contra.
Todo concluyó cuando se estableció una mesa de diálogo con sacerdotes de la localidad y el obispo Hilario González, donde estáran participando miembros de la comunidad hasta llegar a acuerdos de cómo se manejará en adelante la situación de la parroquia, una de las más antiguas de la comunidad saltillense.
La feligresía pretende que el vicario sea distituido de su cargo.
El próximo lunes 4 de abril a las 3:00 de la tarde se reunirá la comunidad con el obispo, para reanudar el diálogo.
Elementos de la Policía Municipal de Saltillo sacaron al sacerdote de las instalaciones y lo resguardaron, evitando que se tomaran represalias físicas en su contra.
