La Secretaría de Salud de Coahuila informó que se han reforzado las acciones de verificación y suspensión de las máquinas expendedoras de agua que incumplen con las prácticas de higiene establecidas por la Cofepris respecto al proceso y manejo de bebidas para consumo humano.
Al respecto, el secretario de Salud Coahuila, Roberto Bernal Gómez, detalló que el objetivo del programa “Agua y hielo purificado” es proteger a la población del riesgo bacteriológico potencialmente presente en estos elementos, y a su vez reducir el riesgo de enfermedades, sobre todo en este período en el que la ola de calor azota perjudicialmente a todos los estados del País
“Actualmente estamos intensificando nuestras labores por este fenómeno climatológico en el que se registran temperaturas muy elevadas, y lo hacemos con el fin de cuidar todos los frentes”, apuntó.
“Una de las recomendaciones para evitar golpes de calor es estar correctamente hidratado, y nuestra labor como autoridades sanitarias es asegurar que el vital líquido que se oferta en máquinas expendedoras o rellenadoras sea limpio y libre de microorganismos perjudiciales”, dijo.
Para efecto, indicó que a partir del 2022 hasta lo que va de 2023 se han hecho 629 verificaciones y 175 suspensiones.
Al respecto, el subsecretario de Regulación y Fomento Sanitario del Estado, Sergio de la Parra Juambelz, comentó que las labores de verificación y suspensión se realizan con base en las normas NOM-201-SSA1-2015. Productos y servicios. Agua y hielo para consumo humano, envasados y a granel; NOM-251-SSA1-2009. Prácticas de higiene para el proceso de alimentos, bebidas o suplementos alimenticios.
“El calor aumenta la proliferación de bacterias. En el caso de los alimentos y las bebidas acelera su proceso de descomposición, convirtiéndose en productos peligrosos para quienes los consumen.
“Esto ocurre también en el agua purificada, sobre todo cuando no se cuentan con las condiciones necesarias para expender agua o hielo”, aseveró.
De igual manera, explicó que beber agua en malas condiciones puede generar infecciones intestinales y deshidratación, pérdida de memoria, falta de control en las funciones corporales como el movimiento, pensamiento y el habla.
En casos más extremos, existe el riesgo de contraer enfermedades, como piedras en los riñones y exceso de minerales en la sangre.
Asimismo, exhortó a la ciudadanía a denunciar a las maquinas rellenadas de agua en caso de identificar lo siguiente: Sabor extraño, como metálico. Olor a cloro, tonalidad turbia o terrosa. Que el negocio en cuestión no tenga los permisos y sellos emitidos por las autoridades sanitarias.







