Monterrey, Nuevo León. El sueño de una figura perfecta terminó en tragedia para Jaqueline Yamilet Briones Torres, de 25 años y originaria de Saltillo, Coahuila. La joven viajó a Monterrey tras ganar una “tanda estética” para costear una lipoescultura. La operación, realizada en un consultorio del Edificio Médico de Especialistas en la colonia Obispado, culminó con una fuerte hemorragia que provocó su fallecimiento.

De acuerdo con la autopsia, la causa de muerte fueron laceraciones en pulmón e hígado, provocadas por un objeto punzante utilizado durante la intervención. El procedimiento se llevó a cabo en un espacio sin quirófano certificado, a cargo de personal no afiliado al colegio profesional correspondiente.
El caso generó aún más indignación al confirmarse que el médico responsable, Dr. Sergio Luis González Flores, no era cirujano plástico, sino que contaba únicamente con una licenciatura en medicina y una maestría en cirugía estética. Tras la tragedia, cerró todas sus redes sociales, generando incertidumbre sobre su paradero y las posibles responsabilidades legales que podría enfrentar.

Tras presentar complicaciones durante la cirugía, Jaqueline fue trasladada al Hospital Universitario, donde falleció poco después de su ingreso. La Fiscalía del Estado ya investiga el caso bajo el protocolo de probable negligencia médica y continúa recabando evidencia en ambos lugares involucrados.
