Durante la noche del lunes 13 y la madrugada del martes 14 de noviembre, hubo manifestaciones enSaltillo, Coahuila; Aguascalientes, Aguascalientes; y Ciudad de México, por el asesinato del magistrade Jesús Ociel Baena Saucedo.
Este lunes trascendió la noticia del hallazgo sin vida del funcionario junto a su pareja sentimental; la empleada doméstica encontró sus cuerpos al interior de su domicilio en Aguascalientes.
La Fiscalía de aquella entidad asegura que no hay pruebas que muestren que se trató de un crimen de odio, y que todo apunta a que las heridas de muerte fueron causadas entre ellos.
Ante estas declaraciones hubo reuniones para exigir justicia en la Estela de Luz en la zona de Chapultepec, en Ciudad de México; en Aguascalientes; y en la Plaza de la Nueva Tlaxcala, en Saltillo, donde se gritaron consignas de la comunidad LGBTTTI.
“¡Crimen pasional es mentira nacional!”, “¡Ociel no murió, el Estado le mató!” y “El Estado no me cuida, ¡me cuidan mis amigues!”, expresaron.
A pesar de la versión de las autoridades, el funcionario ya había denunciado amenazas.
Apenas en julio de 2023 se registró el asesinato del activista guerrerense Ulises Nava; en aquel entonces, Ociel Baena compartió en redes sociales “pude haber sido yo”.






