La trágica historia de la pareja de la tercera edad que vendía elotes afuera de una escuela primaria de la colonia Guayulera nos sigue sorprendiendo
Sabemos que doña Isidra, mejor conocida como «Isi» murió el jueves por complicaciones de sus enfermedades y que don Cristóbal no soportó la muerte de su compañera, esposa y amada y decidió quitarse la vida, pero ¿Por qué ha despertado tantas muestras de cariño esta historia?
Los amables viejitos como los conocían eran parte importante de la escuela Justo Sierra pues mientras doña Isi ayudaba con la limpieza en las mañanas, por las tardes ambos vendían elotes afuera del plantel educativo y por las noches don Cristóbal era el velador.
Según nos cuenta la directora, la pareja que hoy ya no está, fueron los encargados de cuidar la escuela todo el tiempo de pandemia y bastó un fin de semana para llegar y darse cuenta que la pareja ya no estaba.
Además la nostalgia de ver su asador y mesa por el cual ya no regresarán.
